Siete carreras de nuestra Universidad vivirán su proceso de Autoevaluación y Certificación, lo que constituye uno de los mecanismos con que cuenta la UTEM, para asegurar la calidad de las carreras que imparte. Estas carreras son Contador Público y Auditor, Ingeniería en Industria Alimentaria, Bibliotecología y Documentación, Trabajo Social, Ingeniería Civil en Computación, Ingeniería Informática e Ingeniería en Transporte y Tránsito.

Cuatro de ellas, Contador Público y Auditor, Ingeniería en Industria Alimentaria, Ingeniería Civil en Computación e Ingeniería Informática, ya han conformado sus respectivos Comités de Autoevaluación, grupo conformado por directivos, académicos y estudiantes, el cual es responsable de la conducción del proceso reflexivo y, además, de velar por el adecuado funcionamiento de las actividades que se realizarán durante este período.

Este proceso de Autoevaluación y Certificación es coordinado por la Unidad de Autoevaluación de la DGAI, quienes han elaborado documentos y procedimientos internos, que permiten llevar adelante esta tarea de manera eficiente y en regla con los criterios que aprobó la CNA y que han puesto en ejecución las respectivas agencias acreditadoras con las que trabaja nuestra Universidad.

Dieter Koch, Director General de Análisis Institucional y Desarrollo Estratégico de la UTEM, nos aclara que “legalmente ya no podemos acreditar, lo que podemos hacer es certificar, por lo que la Universidad tomó la decisión, alineada con la decisión del CUECH, de continuar con los procesos de aseguramiento de calidad en carrera, por la vía de la certificación, con juicio evaluativo externo … y las primeras carreras que recibieron esa certificación, es una señal muy importante para nosotros, pues le indica a la sociedad de que en la UTEM estamos comprometidos con esto, fueron las carreras de Ingeniería Comercial e Ingeniería en Comercio Internacional”.

Tal como dijimos con antelación, la Autoevaluación es un mecanismo que tiene la Universidad para asegurar la calidad de sus carreras a los y las estudiantes que deciden estudiar en la UTEM, la cual se define a partir de la evaluación de los 12 criterios de acreditación, definidos por la CNA (Comisión Nacional de Acreditación).

Estos criterios abarcan todo el proceso formativo de los y las estudiantes, y van desde los propósitos que la Universidad y carrera declara tener y llevar adelante; el tipo de profesionales que formamos, hasta elementos como el perfil de egreso, el plan de estudios, vinculación con el medio, infraestructura, investigación, participación estudiantil y autorregulación, entre otros.

Es importante destacar que estos procesos de Autoevaluación de programas de Pregrado, han permitido a nuestra Universidad pasar de cero carreras acreditadas en 2013, a 64% de sus programas de pregrados acreditados en diciembre de 2016; 100% en marzo de 2017 y 81.8% en marzo de 2019. Este logro ha sido posible tras el establecimiento de estándares y procedimientos para el desarrollo de los procesos, así como gracias al trabajo coordinado y de acompañamiento a las carreras y sus Comités de Autoevaluación por parte de la DGAI.

“Lo más importante es que en aseguramiento de calidad importan los procesos autoevaluativos internos, donde la propia comunidad es la que define cuáles son sus fortalezas y cuáles sus debilidades, para luego levantar un plan de trabajo y hacerse cargo de esas debilidades. Pero, además, cuando ese juicio autoevaluativo es sancionado externamente, cuando lo sometes a la evaluación de pares, que no tienen ningún vínculo contigo, cobra mayor validez, porque es un proceso interno que recibe un juicio externo. Entonces, alguien desde afuera nos dice, además, si hemos sido consistentes con la información que hemos presentado y nos colabora y reporta en aquellas cuestiones en las cuales tenemos que hacernos cargo en los más diversos ámbitos”, enfatiza el Director de la DGAI, Dieter Koch.

Actualmente, las carreras en proceso de autoevaluación, se encuentran trabajando con sus respectivos Comités, en la disminución de brechas identificadas a partir de la implementación de los nuevos criterios, a corto y mediano plazo; el establecimiento y desarrollo de acciones que permitan acortar las brechas en los criterios identificados como débiles y también la coordinación con unidades del nivel central, para subsanar debilidades entre el estado actual de la carrera y los nuevos criterios de la CNA.

Luego de este paso, viene la Elaboración de Formularios e Informe de Autoevaluación; la Visita Preparatoria de Pares; y la Evaluación Externa, todos ellos como parte de un mecanismo de Mejora Continua permanente y sistemático en el tiempo. Sin embargo, no sería posible tener éxito si no es por el compromiso y trabajo de cada uno de los actores, institucionales, que forman parte de este importante proceso de certificación de la calidad de nuestro quehacer.